Después de un estado de embriaguez y euforia, la marihuana afecta de manera negativa muchas de las actividades motoras, como el balanceo de cuerpo y temblor en las manos. Estudios neuropsicologicos y electrofisiológicos demuestran que se puede producir un mayor deterioro de la memoria, incluyendo la codificación, la consolidación y la recuperación.
Un alto consumo de esta droga puede a una perdida completa de la cognición y del comporamiento, el cual se ve reflejado en delirio de persecución, depresión, desde un puto de vista microscópico, impide la la liberación de distintos tipos de neurotransmisores.
Dado que la mayoria de consumidores de marihuana son politóxicomanos, otro efecto del cannabis es que refuerza la adicción a otro tipo de sustancias, es decir, si la persona es adicta a la nicotina y consume marihuana, esa adicción al tabaco se va ver reforzada, ya que los cannabinoides en el cerebro aumentan la ansiedad.
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